lunes, 5 de mayo de 2014

"BRASIL, VAMOS A DESPERTAR: UN PROFESOR VALE MÁS QUE NEYMAR"



Queridos amigos y lectores:


Les había prometido mostrar el cartel que decía: 
"Brasil, vamos a despertar: un profesor vale más que Neymar".

Y lo hago ahora, acercándoles una de tantas fotos donde puede leerse dicha frase.

 Foto: Fábio de Mello Castanho / Terra
Foto: Fábio de Mello Castanho / Terra


Está muy lejos de mi, el pretender discriminar profesiones, enalteciendo la del docente y denigrando la del deportista.
Jamás cometería yo semejante injusticia.
Cada uno de nosotros tenemos una misión en la vida, y cada una de las profesiones aportan lo suyo para satisfacer nuestras necesidades.


Pero no es justo que exista un abismo de diferencia entre las remuneraciones que se otorgan a los distintos profesionales, siendo que cada uno de ellos es necesario, o indispensable incluso, en la sociedad.

La vida, es cierto, no es solo trabajo: pero tampoco es solo diversión. Debemos retribuir con justicia a cada profesional, para no desequilibrar la balanza de las recompensas, acorde con lo que amerita la profesión de cada uno. Es lógico que habrá profesiones que permitan ganar más que otras: de eso no caben dudas. Lo inaceptable es la desproporción entre las recompensas.


LA FRASE DE LOS MANIFESTANTES ME HACE PENSAR EN DOS REALIDADES, 
    según la tome como manifestante o como docente:

  • 1. Como manifestante: con esa frase expreso mi indignación ante los enormes gastos realizados por el Gobierno para la construcción de Estadios con miras a la Copa del Mundial, en detrimento de la EDUCACION Y LA SALUD, en donde, comparativamente, se invierte poquísimo, siendo ambas más importantes que los Estadios y la Copa.
El mismo Neymar se adhiere a estas manifestaciones del Pueblo:
(FUENTE: TERRA).

La máxima estrella de la selección brasileña, Neymar, utilizó las redes sociales este miércoles para referirse por primera vez a las protestas sociales que sacuden el país desde la semana pasada en reclamo contra el gasto público para la Copa Confederaciones y el Mundial 2014.

El delantero emitió un comunicado (por Instagram) con la bandera de su nación de fondo en el que critica la gestión del gobierno de la presidenta Dilma Rousseff y aseguró que las manifestaciones lo inspirarán para jugar de la mejor manera ante México esta tarde en Fortaleza.

"Triste por todo lo que está ocurriendo en Brasil. Siempre tuve fe en que no sería necesario que llegáramos a un punto de 'ir a las calles' para exigir mejores condiciones de transporte, salud, educación y seguridad, todo eso es OBLIGACIÓN del gobierno" (sic), escribió.

Además, el astro recordó que sus padres "trabajaron mucho para poder ofrecerme a mí y a mi hermana un mínimo de calidad de vida". 

Junto con ello, señaló que "hoy, gracias al éxito que ustedes me proporcionan, podría parecer demagogia de mi parte -pero no lo es- levantar la bandera de las manifestaciones que ocurren en todo Brasil.
Pero soy BRASILEÑO y amo mi país!!".

Al cierre, Neymar remarcó que tiene familia y amigos en esta nación "por eso también quiero un Brasil más justo, más seguro, más saludable y más HONESTO".
  • 2. Como docente: con dicha frase expreso mi profundo rechazo por la manera injusta de repartir el dinero en el mundo entre los distintos profesionales, destinando sumas  millonarias a los jugadores de fútbol, y a la construcción de Estadios, y  apenas pequeñas sumas para pagar los sueldos de los docentes, y para la construcción de Escuelas. ¿Cómo es posible que se derroche tanto para el fútbol, y no se valore el trabajo del educador? Esa forma de administrar los recusos del estado es ofensiva, o es una gran injusticia.Una falta de equidad:
Al deportista, es cierto, le debemos horas de diversión
Pero al docente le debemos la profesión con la cual nos ganamos la vida.

¿Por qué tanta diferencia en la remuneración a cada uno de ellos?

Pasa lo mismo con los programas radiales y televisivos:

  • Se derrochan horas y horas en comentarios de fútbol, o en programas triviales, en los cuales predomina la farándula o la exhibición del cuerpo femenino, como mercadería atractiva.
  • Pero se concede poco o nulo espacio a los programas culturales o artísticos.
  • Se premia al que marca un gol
  • Pero no al que escribe un libro.
Es como decir:
  • Se gasta mucho en lo que vale poco,
  • Y se gasta poco en lo que vale mucho.

  • Se endiosa a un gran director técnico
  • Pero no es noticia un gran profesor.
Se han trastocado los valores:

  • Jamás un docente puede aspirar a ganar lo que gana un futbolista, o un cantante
  • Y nadie puede dar alguna explicación que justifique esta discriminación dolorosa.

En todo eso pienso cuando leo el cartel que dice:

"un profesor vale más que Neymar".



Cordiales saludos:
Dr. Francisco Oliveira y Silva 



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