martes, 14 de enero de 2014

EL "CASCO INTELIGENTE" Y OTRAS TONTERÍAS



Queridos amigos y lectores:


Motociclista realiza prueba de campo del "casco inteligente" .
Motociclista realiza prueba de campo del "casco inteligente" . / Ministerio de Salud (ABC-Color)


La inteligencia es la capacidad de resolver problemas de las más variadas índoles.
Por eso se habla de inteligencia lógico-matemática, inteligencia emocional, inteligencia espiritual, inteligencia intrapersonal, etc.
Cuando se habla de "CASCO INTELIGENTE" se está hablando de un disparate.
  1. No solo porque una cosa es incapaz de tener inteligencia,
  2. sino porque esa cosa es incapaz de resolver ninguno de los problemas, de tránsito en este caso, que ocasionan la muerte de los que se movilizan en motos.

También pongo en duda la inteligencia de sus inventores, salvo que hablemos de "inteligencia comercial", la cual no existe en los libros de Psicología, pero que podría referirse a los que "se las ingenian" para ganar dinero fácil, sin arriesgar nada. En efecto: los padres de este ridículo invento están esperando la promulgación de una ley ¡que nos obligue a comprar su mercancía!
Así cualquiera hace negocio.

También dudo de la inteligencia de sus fervorosos promotores cuyo argumento, presentado como un modelo de responsabilidad del Estado, afirman, casi con unción patriótica, que "EL ESTADO NO PUEDE PERMANECER INDIFERENTE ANTE TANTAS MUERTES".
¿No es "conmovedora" tanta diligencia, casi paternal, del Estado?
¡A otro perro, con ese hueso!
 


 Les pregunto a estos promotores, entre los que los más insistentes e incisivos son su inventor, Mario Jara, y su acompañante Salyn Buzarquis:

¿Acaso se muere solamente "de moto"?


¿No se muere también "de hambre", "de ignorancia", "de pobreza", "de falta de ambulancias", "de falta de camas de terapia intensiva", "de falta de insumos", "de sobredosis de drogas", "de crac callejero" etc.etc.?


¿POR QUÉ EL ESTADO PERMANECE INDIFERENTE ANTE ESAS OTRAS MUERTES?
Me responderán: "¡Porque las muertes de motociclistas cuestan al Estado 100 millones de dólares al año" (sic)!

Les pregunto entonces dos cosas:
  • 1. ¿No son iguales todas las muertes?, ¿o eso depende de lo que las mismas cuesten al Estado? Mientras nos ocupamos de preservar la vida de los motociclistas, para ahorrar gastos al Estado, ¿vamos a dejar que se mueran los indígenas, los niños de la calle, los que no tienen dinero para comprarse los fármacos e insumos que el Estado no provee a los hospitales públicos?
  • 2. ¿De veras creen ustedes que morirán menos motociclistas a partir de la promulgación de la Ley del casco "inteligente"? 
Yo les voy a dar la respuesta: 


  • EL ESTADO NUNCA PERMANECE INDIFERENTE SI NO TIENE QUE PONER PLATA.
  • PERO PERMANECE INDIFERENTE SI TIENE QUE INVERTIR: EN EDUCACIÓN, EN HOSPITALES EN RUINAS O DESABASTECIDOS, EN CAMAS DE TERAPIA INTENSIVA, EN AMBULANCIAS, EN FÁRMACOS ELEMENTALES E INSUMOS ESENCIALES, EN SALUD GRATUITA PARA LOS MÁS CARENCIADOS, EN ESCUELAS QUE CAEN A PEDAZOS, ETC.
  • Es mucho más cómodo para el Estado, económicamente hablando, hacer leyes "SUPUESTAMENTE" encaminadas a resolver ciertos problemas, pero ¡OBLIGANDO AL CIUDADANO A "PONER"! El ciudadano "pone", y el Estado recauda.
Dije "supuestamente", porque esa Ley del casco "inteligente", como otras de esa clase, no van encaminadas a resolver ninguno de los problemas que mencionan, sino que son solo un pretexto para recaudar, en aras de "la ya folclórica tragada".

Pongo ejemplos:

IVESUR: "supuestamente" ideada para resolver el problema de los accidentes de tránsito por desperfectos del vehículo. Pero a causa de los tremendos baches que destrozan tu vehículo ¡que IVESUR ni nadie te lo repara! para la próxima inspección, y de los semáforos "inteligentes" que ya no andan, los accidentes fatales siguen ocurriendo igual que antes, y las chatarras, echando humo venenoso, siguen circulando impunemente. Mientras cada conductor particular debe gastar más de un millón de guaraníes para hacer reparar los daños ocasionados en su vehículo por los baches mortales, antes de la nueva inspección de IVESUR. Allí se demuestra que no es la vida, sino la plata lo que interesa.

El ciudadano pone, el Estado recauda, y los accidentes siguen ocurriendo.

SOAT: "supuestamente" también para evitar más accidentes, y contar con un seguro que cubra los gastos; pero el seguro solamente pagará los cráneos rotos, pero no evitará que los mismos se sigan quebrando. Nuevamente: no es la vida, sino la plata, lo que importa.
El ciudadano pone, el Estado recauda, y los accidentes seguirán ocurriendo.

MARCO RECTOR SEXUAL: supuestamente para evitar el Sida y los embarazos de adolescentes, inculcando a los niños que la homosexualidad es normal, que se debe permitir el matrimonio gay, que las niñas pueden tener sexo y abortar sin decir nada a los padres, y burradas por el estilo. Pero enseñando semejantes aberraciones, lejos de prevenir el Sida y los embarazos, se los está promoviendo. Pero hay recompen$a del exterior para los cipayos promotore$, mientras los padres pierden sus derechos y ofrendan sus hijos al Estado. El Estado recaudará la inocencia de los tiernos niños.  
Otra vez: no es la salud sexual, ni la evitación de muertes por aborto lo que importa, sino lo$ premio$.

El ciudadano pone, el Estado recauda, y los accidentes sexuales seguirán ocurriendo.

Voviendo al casco "inteligente" de marras: podrá detectar, SEGÚN PROMOCIONAN, si el conductor ha bebido, si su acompañante tiene puesto el casco, o si hay sobrepeso en la moto:  y en estos casos ¡la moto no arrancará! 
¡Qué sorprendente! ¡Deslumbrante tecnología al servicio de la economía del Estado!

Pero ese casco NO DETECTARÁ JAMÁS:
  • Si el conductor es un loco.
  • Si el conductor sabe manejar. 
  • Si el conductor está drogado.
  • Si el conductor conoce el reglamento de tránsito.
  • Si el conductor es epiléptico. 
  • Si su moto está en condiciones.
  • Si el conductor es amante de las altas velocidades.
  • En pocas palabras: SI EL CONDUCTOR ES PRUDENTE. Cualquiera de estas situaciones aquí señaladas pueden ocasionar un accidente fatal, como el que publicó ABC-Color el día 7 de enero: SAN ANTONIO. Una mujer sufrió un ataque de epilepsia cuando se desplazaba a bordo de su motocicleta y falleció tras caer al asfalto. 
Además:

  • El costo de ese casco ¿estará al alcance de todos los bolsillos? No escuché aún que se mencionara su precio. 
  • Si se descompone: ¿En qué talleres se repararán esos cascos? ¿Cuánto saldrá la reparación?
  • Porque será muy penoso que al quedarte sin casco, te quedes también sin moto. 
  • ¿Quién controlará a más de un millón de motociclistas, para verificar si el casco que usan es inteligente o no los es?
  • ¡Ni pueden controlar las chapas, los registros, los papeles de las motos, ¿y van a poder controlar la calidad de los cascos? ¡No nos hagan reir!
  • Y debo recordarles que ninguna ley funciona si no existe alguien que pueda controlar su cumplimiento.

Honorables Señores del Estado:

No comemos vidrio. Dejen de seguir mintiendo a la ciudadanía, que ya está harta de la corrupción ya crónicamente empotrada en el Poder.
¡DÉJENSE DE DISFRAZAR LO$ INTERE$ES DE USTEDE$, CON EL ROPAJE DE "BENEFICIOS PARA LA CIUDADANÍA":¡Qué tiernos!

El libro "Martín Fierro", obra literaria, toda escrita en versos, genial creación del poeta José Hernández, monumento emblemático de la cultura gauchesca Argentina, es un libro de honda filosofía humana-universal.
Martín Fierro, su protagonista, es un gaucho inmensamente sufrido, pero muy inteligente. 
Él sí era inteligente, porque se trata de un ser humano, no de un semáforo, o de un casco.
Este hombre, antes de separarse definitivamente de sus hijos, ya mayores, les da unos consejos de muy profunda sabiduría. Son 25 consejos, de los cuales copio 7, por aludirse en ellos, más de cerca, al tema que estamos tocando. Dicen:


Su esperanza no la cifren
Nunca en corazón alguno.
En el mayor infortunio
Pongan su confianza en Dios.
De los hombres, sólo en uno,
Con gran precaución en dos.


El trabajar es la ley
Porque es preciso alquirir.
No se expongan a sufrir
Una triste situación.
Sangra mucho el corazón
Del que tiene que pedir.


Debe trabajar el hombre
Para ganarse su pan;
Pues la miseria en su afán
De perseguir de mil modos,
Llama en la puerta de todos
Y entra en la del haragán.


Muchas cosas pierde el hombre
Que a veces las vuelve a hallar.
Pero les debo enseñar
Y es bueno que lo recuerden:
Si la vergüenza se pierde
Jamás se vuelve a encontrar.


Los hermanos sean unidos,
Porque ésa es la ley primera.
Tengan unión verdadera
En cualquier tiempo que sea,
Porque si entre ellos pelean
Los devoran los de ajuera.


Ave de pico encorvado
Le tiene al robo afición.
Pero el hombre de razón
No roba jamás un cobre:
Pues no es vergüenza ser pobre,
Y es vergüenza ser ladrón.


Y les doy estos consejos
Que me han costado adquirirlos,
Porque deseo dirigirlos,
Pero no alcanza mi ciencia
Hasta darles la prudencia
Que precisan pa seguirlos.

Recalco los tres versos finales:

Pero no alcanza mi ciencia
Hasta darles la prudencia
Que precisan pa seguirlos
.



Si un humano inteligente es capaz de dar a sus propios hijos los mejores consejos, pero no podrá darles la voluntad de llevarlos a la práctica, es decir, la prudencia necesaria para eso, ¿qué podemos esperar, en lo que a la prudencia se refiere: 


  • de IVESUR,
  • del SOAT,
  • del MARCO RECTOR SEXUAL,
  • o de UN CASCO apodado "inteligente"?

No merecen ser considerados, ni remotamente, como solución a ninguno de los problemas que ponen como simple pretexto para lograr otro$ fine$.

Cordiales saludos:
Dr. Francisco Oliveira y Silva
Cel.: 0985 24 26 01

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