"OH FELIZ NOCHE, TÚ SOLA FUISTE TESTIGO DEL MOMENTO EN QUE CRISTO RESUCITÓ"

Esta frase se canta en el pregón Pascual o Exultet en la ceremonia de la Vigilia de Pascua..


La resurrección de Jesucristo es el fundamento de la fe Cristiana.


Les acerco algunos versículos de la carta de san Pablo a los Corintios, invitándoles a reflexionar sobre esta gran verdad:

¡LA MUERTE NO ES EL FINAL!


CRISTO VENCIÓ A LA MUERTE: POR ESO ESTAMOS SEGUROS DE NUESTRA RESURRECCIÓN "EN EL DÍA FINAL".


Primera Carta a los Corintios Capítulo 15: 

Jesucristo ha resucitado


03Les he transmitido en primer lugar, lo que yo mismo recibí: Cristo murió por nuestros pecados, conforme a la Escritura.
04Fue sepultado y resucitó al tercer día, de acuerdo con la Escritura.
05Se apareció a Pedro y después a los Doce.
06Luego se apareció a más de quinientos hermanos al mismo tiempo, la mayor parte de los cuales vive aún, y algunos han muerto.
07Además, se apareció a Santiago y a todos los Apóstoles.
08Por último, se me apareció también a mí, que soy como el fruto de un aborto.
09Porque yo soy el último de los Apóstoles, y ni siquiera merezco ser llamado Apóstol, ya que he perseguido a la Iglesia de Dios.

12Si se anuncia que Cristo resucitó de entre los muertos, ¿cómo algunos de ustedes afirman que los muertos no resucitan?
13¡Si no hay resurrección, Cristo no resucitó!
14Y si Cristo no resucitó, es vana nuestra predicación y vana también la fe de ustedes.

20Pero no, Cristo resucitó de entre los muertos, el primero de todos.

35Alguien preguntará: ¿Cómo resucitan los muertos? ¿Con qué clase de cuerpo?
36Tu pregunta no tiene sentido. Lo que siembras no llega a tener vida, si antes no muere.
37Y lo que siembras, no es la planta tal como va a brotar, sino un simple grano, de trigo por ejemplo, o de cualquier otra planta.
38Y Dios da a cada semilla la forma que él quiere, a cada clase de semilla, el cuerpo que le corresponde.
39No todos los cuerpos son idénticos: una es la carne de los hombres, otra la de los animales, otra la de las aves y otra la de los peces.
40Hay cuerpos celestiales y cuerpos terrestres, y cada uno tiene su propio resplandor:
41uno es el resplandor del sol, otro el de la luna y otro el de las estrellas, y aun las estrellas difieren unas de otras por su resplandor.
42Lo mismo pasa con la resurrección de los muertos: se siembran cuerpos corruptibles y resucitarán incorruptibles;
43se siembran cuerpos humillados y resucitarán gloriosos; se siembran cuerpos débiles y resucitarán llenos de fuerza;
44se siembran cuerpos puramente naturales y resucitarán cuerpos espirituales. 

53Lo que es corruptible debe revestirse de la incorruptibilidad y lo que es mortal debe revestirse de la inmortalidad.
54Cuando lo que es corruptible se revista de la incorruptibilidad y lo que es mortal se revista de la inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra de la Escritura: La muerte ha sido vencida.
55¿Dónde está, muerte, tu victoria? ¿Dónde está tu aguijón?

57¡Demos gracias a Dios, que nos ha dado la victoria por nuestro Señor Jesucristo!


Cordiales saludos:
Dr. Francisco Oliveira y Silva