viernes, 25 de julio de 2014

LAS OBRAS JAMÁS PODRÁN REEMPLAZAR LA FALTA DE CARIDAD



Queridos amigos y lectores:

Como es de público conocimiento, el Cardenal Santos Abril de Castelló, enviado del Papa para intervenir la Diócesis de Ciudad del este sufrió un desmayo durante un acto de homenaje, cayendo al suelo.



  1. ABC Color ‎- hace 15 horas
    [VIDEO] En pleno acto en la sede de la Gobernación de Alto Paraná, el cardenal Santos Abril y Castelló perdió el conocimiento.

El Papa llamó por teléfono de inmediato. Ahora ya está recuperado.
Una persona me escribió preguntándome cuál podría ser la causa de esta caída. Esto le respondí:

Yo pienso que, más que un problema de salud, aquello fue una caída, como la de Jesús, por el excesivo peso de la cruz que ahora está llevando sobre sus espaldas con esta intervención de aquella diócesis cismática.

¡Cuántas puerquezas habrá descubierto ya este Cardenal experto en finanzas, que comanda el grupo de Cardenales que lograron limpiar de tanta mugre el Instituto para las Obras Religiosas (IOR), más conocido como Banco Vaticano!

Por lo visto, en aquella Diócesis de Livieres, este Cardenal llegó a sentir el "olor de Satanás", y esto lo descompensó provocándole un desmayo. Esto es una metáfora, pero no así el enorme peso del trabajo que está realizando en CDE.

 Un médico lo atribuyó a la presión, o a la falta de alimentos, ya que está sin comer por problemas de intoxicación. Yo veo más lo psicológico.
(Hasta aquí mi respuesta).
Lastimosamente hay personas que piensan que el escándalo que dio Monseñor Livieres Plano desnudando públicamente a la Iglesia, hasta en sus más secretas intimidades, queda saldado por las obras que este hombre realizó en su Diócesis de CDE.
Es así como algunos, al leer mis comentarios, en lugar de justificar las agresiones que Livieres hizo a la Iglesia paraguaya difamando a obispos y sacerdotes, criticando incluso a la Iglesia universal y las"malas costumbres"  de la misma, según él, erigiéndose él como modelo, se dedican a repetir, como un disco rayado, que él cultivó el arte sacro, la liturgia, y decenas de cosas más.
Nadie, absolutamente nadie, intentó tan siquiera referirse al escándalo mediático que perpetró este hombre, ni a sus manejos financieros con la Itaipú, que fueron los verdaderos motivos de la intervención de esa diócesis ordenada por el Papa.

No obstante, lo que más impacto produjo en la feligresía, entre ambos delitos, fue el del atropello que hizo a la Iglesia paraguaya, escrachándola ante la prensa, como lo hacen ciertas bellas señoritas modelos agrediendo a sus pares, en vulgares programas faranduleros. Ellas están en lo suyo: pero un obispo como ellas ¡no!
Como demostración de lo que afirmo, me pareció oportuno transcribir lo que escribí en mi página de Facebook, LAS CRÍTICAS A MIS COMENTARIOS, y las respuestas que les di.
Esta puede ser una página histórica porque aparecen los dos enfoques ideológicos:
  • La primacía de la Caridad,
  • versus la primacía de las obras.
Espero que les resulte últil este material.

Cordiales saludos:
Dr. Francisco Oliveira y Silva.  
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¡Qué tonto es el ser humano cuando se embandera en una causa injusta o necia, defendiendo gravísimos errores, por la imple simpatía con el líder de dicha causa, o por motivo$ crematí$tico$ e interesados!
Esta es una triste realidad que hoy se está dando en la Diócesis de Ciudad del Este, la cual, a raíz de los escándalos mediáticos desatados por su Obispo Rogelio Livieres, está siendo auditada por la Santa Sede.
Esperamos que todo vuelva a su cauce normal lo antes posible, porque el daño que ha hecho este obispo a la Iglesia, es inmenso.

  • Olgamaria Heinrich de Cardoen Tenga mas calma en sus comentarios ya que la verdad hay que esperarla con paciencia y al menos hoy el sacerdote acusado Carlos Urrutigoity la fiscalia desestimo la denuncia a veces lo mejor es esperar y mantenerse en silencio Remigio
  • Francisco Oliveira ¿A qué viene su consejo, señora, referente a mis comentarios? En ellos se refleja el dolor de nuestros obispos y sacerdotes, así como de la feligresía paraguaya escandalizada por los agravios cometidos por monseñor Livieres contra Dios al atacar la Iglesia, hablando en contra de obispos y sacerdotes, ¡y sin tener pruebas! según lo dice él mismo. Estos agravios se esperan de algún agnóstico o anticlerical, pero no de un obispo que, en lugar de predicar el perdón, predica "no perdonar si Cuquejo no se retracta": ¿qué religión es esa, que enseña a perdonar poniendo condiciones? No pida, entonces, calma a mis comentarios, mientras este obispo ataca desenfrenada y despiadadamente, sin dar tregua, a la Iglesia, como si fuera un elefante atropellando una cristalería fina. Lo que yo pido, señora, y lo habrá leído si leyó TODO mi comentario, es "mantener la paz en el corazón". Por si no lo leyó se lo acerco. Pero terminada la Intervención de la diócesis de Monseñor Rogelio Livieres Plano, Roma dará su veredicto inapelable, que no será, ciertamente, del agrado de usted ni de quienes apoyan a este obispo divisionista. Esto escribí al final de mi reflexión:
    ¿Qué hacer, entonces, ante tan dolorosa situación?
    Mantener la paz en el corazón, no temiendo el furor de la tormenta que se abatió sobre la Iglesia paraguaya, como la que se desató sobre el Mar de Tiberíades.
    La Barca de Pedro no sucumbirá porque en ella va Jesús.

    Él hoy nos dice: "No tengan miedo, hombres de poca Fe".
    Y nosotros, en nuestras oraciones y Comuniones eucarísticas le diremos: "Señor, yo creo, pero aumenta mi Fe".
  • Olgamaria Heinrich de Cardoen No tengo deseos de pelear pero no dejemos de considerar que podemos equivocarnos al no conocer en profundidad la verdad de todas maneras no nos corresponde a nosotros juzgar
  • Francisco Oliveira Nadie pretende pelear, señora, sino exponer su pensamiento. Y teniendo copias de los videos, como las tengo yo, donde Livieres ataca a sus pares y a las demás diócesis, riéndose a carcajadas al acusar a otro obispo de homosexual, y pidiendo a Mina, en chiste, y riéndose, como si fuera una pavada su acusación, "mucha plata" para contar el nombre del otro obispo, creo que no se necesita ser juez para darse cuenta de que este hombre se está comportando como un charlatán agresivo, como los de la farándula. Esperemos la sentencia de Roma, y DESPUÉS SEGUIREMOS HABLANDO.
  • Francisco Oliveira ¿Cómo pretende pedirme calma ante las sacrílegas ofensas del obispo Livieres, que van dirigidas contra Dios mismo al atacar a Su Iglesia? Tenga usted más prudencia, señora, antes de dar semejante consejo descaminado. Todos estamos pendientes de lo que dirá Roma, lo cual, se lo aseguro, no va a ser del agrado de usted, ni de los "leales" a este obispo escandaloso. Lo de Urrutigoiti tampoco tendrá un desenlace del gusto de quienes le apoyan. Pero la voz de Roma no admite discusión. Este pensamiento lo escribí anteriormente, y se me borró. Ahora volvió a aparecer y lo envío, aunque repite casi lo mismo de lo que dije anteriormente, pero de una forma un poco más clara.
  • María Fariña Ovelar Ok. Somos bastante ingenuos!! Por amar la liturgia, por amar el arte sacro, por ser capaces de dar la vida por una persona que aún no se ha hecho hijo de Dios, por desear fervientemente que todos tengan acceso a los sacramentos, por defender a nuestro obispo, que "imprudentemente" no siguió la misma linea de los demás obispos, sino que hizo algo más. Hizo exactamente lo que todo obispo tiene que hacer, formar a sus sacerdotes según el corazón de Cristo y que estos lleven el anuncio del evangelio y los sacramentos a todos. Pobre, el obispo no tiene el don vi-locación.

    Sobre la visita apostólica, bien. Nadie está más contento que los laicos de CDE, porque por fin comprobaran todas las obras pastorales que impulsó este pastor a quien usted tanto ofende.
  • Olgamaria Heinrich de Cardoen Le repito lo mismo que usted afirma esperemos la sentencia de Roma y despues hablamos eso me parece lo mas inteligente por eso creo que hacer juicios anticipados me parece poco prudente y es por esto que hay que tener prudencia en anticipar opiniones sin conocer todos los antecedentes y le repito paciencia
  • Francisco Oliveira Señora Olgamaria: ¿cómo sabe usted que yo no cuento con TODOS los antecedentes sobre el caso Livieres? Los tengo, señora, y por eso he pronosticdo lo que se le va a venir encima a este señor que ha atropellado a la Iglesia despiadadamente difamándola y escrachándola en la tele. ¡Eso no tiene nombre! Por eso he dicho que creo que lo removerán del cargo: tenemos derecho a opinar, ¿o no? Para su tranquilidad, le reitero que tengo los antecedentes. Y puede estar segura de que todos los que nos hemos sentido gravemente heridos por las declaraciones mediáticas de este escandaloso señor, tenemos paciencia de sobra para seguir aguantando sus exabruptos, de modo que está demás su consejo de tener paciencia. Más bien hay que aconsejarle al  escandaloso señor Livieres, que tenga prudencia, aunque ahora es demasiado tarde, porque ya ha completado su vil trabajo de embadurnar a la Iglesia.
  • Francisco Oliveira María Fariña Ovelar: TODO lo que usted menciona a favor del escandaloso Livieres NO VALE PARA NADA, porque lo dijo San Pablo: "Y si teniendo el don de profecía y conociendo todos los misterios y toda la ciencia, y tanta fe que trasladase los montes, SI NO TENGO CARIDAD NO SOY NADA" (1a. Cor.13, 2) Y este señor escandaloso, aparte de no tener todo lo que menciona San Pablo, NO TIENE CARIDAD, y lo expresó públicamente, refiriéndose a nuestro Arzobispo, diciendo: "El me tira una piedra, yo le tiro otra piedra", y sentenció: "NO LE VOY A PEDIR PERDÓN SI PRIMERO ÉL NO SE RETRACTA". Desconozco cuál es la secta en la que se predica tan extraña doctrina sobre el perdón. Jesús, agonizando en la Cruz, suplicó a su Padre perdonar a sus asesinos, sin poner condiciones. Ese es el ejemplo que debemos seguir, no el de Livieres. Aunque el señor Livieres promueva liturgia, arte sacro, y traslade montañas, SI NO TIENE CARIDAD, ÉL NO ES NADA. Lastimosamente todos los que intentan defender a este señor, repiten, como un disco rayado, las mismas cosas: obras y más obras. Pero nadie sale a justificar el escándalo televisivo que cometió este hombre, como si fuera un político que escracha a otros políticos. De esto nadie habla: Y ESTE ES EL PRINCIPAL MOTIVO DE LA INTERVENCIÓN DE LA SANTA SEDE, es decir, SU RBELDÍA CONTRA LA IGLESIA PARAGUAYA A LA CUAL ÉL, FALTANDO A LA CARIDAD, DESPRECIA. Hablen de esto, por favor, no de iturgia y arte sacro. El sacerdote Marcial Maciel Degollado hizo muchísimas obras, más importantes que las de Livieres. Pero Benedicto XVI lo expulsó de la Iglesia, porque las obras, por sublimes que sean, no suplen la ausencia de la Caridad.

4 comentarios:

  1. ¡El que tenga ojos, que lea! ¡El que tenga cerebro, que piense!
    Acaso Mons. Cuquejo no difamo directamente al Padre Carlos e indirectamente a Mons, Rogelio? Eso no ves Francisco? Mons. Cuquejo fue el que falto a la Caridad, el fue el que encendio la mecha. Acaso un Obispo malo puede dar buenos frutos? Deja de ser ciego, te esperamos por la Diocesis cuando quieras! “Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos? Así, todo árbol bueno da frutos buenos, pero el árbol malo da frutos malos. Un árbol bueno no puede producir frutos malos, ni un árbol malo producir frutos buenos. Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y arrojado al fuego. Así que por sus frutos los reconoceréis.”San Mt (7, 16 -20).


    tu hermano en Cristo,
    Jesùs Arguello. Hernandarias, Alto Paraná.

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    1. Jesús Argüello: Muchísimo ya me escribiste en Facebook, y yo te respondí con bastante extensión.
      Ahora lo haces en mi blog, y yo publico tu floja opinión, carente de argumentos valederos.
      En todos mis escritos y comentarios en el mail, en el blog, y en el facebook, que fueron muchísimos y sumamente extensos, YO TRATÉ UN SOLO TEMA: EL ESCÁNDALO MEDIÁTICO QUE SE MANDÓ LIVIERES, dos veces, hablando desenfrenadamente y "SIN PRUEBAS CONCLUYENTES", según sus propias palabras, SOBRE LA HOMOSEXUALIDAD DE OBISPOS Y SACERDOTES PARAGUAYOS.
      ¡Y eso está mal, muy mal! Tanto que el Vaticano ya le bajó dos sanciones a Livieres: prohibirle ordenar más sacerdotes, hasta nuevo aviso, y destituirle al tal URRUTIGOITY, su segundo, no difamado, sino YA FAMOSO en el mundo eclesial y social, por el tema de abusos sexuales y pedofilia, supuestamente inexistentes. Roma lo dirá.

      De ahora en adelante, Argüello, tendrás que escribir a los enviados del Papa, para decirles lo que dijo Livieres: "¡que le difamaron ante ellos!", subestimando así, no solo la dignidad y la excelente capacidad de estos eminentísimos interventores, sino la del Papa mismo, que fue quien firmó el Decreto, basado, supuestamente también él, en simples difamaciones.
      ¡Vamos, Argüello! No defiendas lo indefendible, ni te pongas a aplicar el evangelio allí donde se lo ha profanado.
      ¿Qué extraña doctrina es la de Livieres cuando dice: NO LE VOY A PERDONAR HASTA QUE SE RETRACTE?¿Es eso lo que enseñó Jesús sobre el perdón?
      O, cuando dijo, en una moderna versión del "ojo por ojo", escandalizando siempre: "ÉL ME TIRA UNA PIEDRA, YO LE TIRO OTRA PIEDRA", ¿dio, acaso, con semejante metáfora, un ejemplo del perdón cristiano?
      Por eso te pido que ya no te comuniques conmigo, sino con los interventores papales, que ya bajaron una dura sanción para Livieres. Pero debes referirte AL TEMA EN CUESTIÓN, que es el del ESCÁNDALO, no el de opinar sobre quién difamó a quién, directa e indirectamente, ni a divagaciones sobre "obras edilicias" realizadas.
      Tienes que prepararte porque, a juzgar por las dos sanciones mencionadas, los vientos de la Iglesia están yendo contra Livieres y su segundo, no contra la CEP. Y, posiblemente, llegarán sanciones más severas aún. Estamos a la espera de lo que resuelva el Papa.

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  2. Este hombre busca que Livieres se arrodille frente a su protegido de quien se dice peores cosas. Bien, no está en mi ánimo discutir la sexualidad de aquel arzobispo, pero el tal Francisco Oliveira debería cuidar más sus críticas y conocer mejor tanto a sus ofendidos como a sus defendidos.

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    1. Cristhian: ni en sueños imaginé a Livieres arrodillándose delante de nadie, lo cual es fruto exclusivo de tu fogosa imaginación; ni tampoco escribí un solo renglón acerca de la sexualidad de ninguno de los dos obispos en conflicto.
      Mis críticas no requieren conocer a ninguno de los dos, porque las mismas van encaminadas EXCLUSIVAMENTE al escándalo que se mandó Livieres, DOS VECES, ante la TV, lo cual le costará una severa sanción de Roma, y dije que eso es una falta muy grave contra la caridad, y una manifestación de soberbia, pretendiendo pasar él como modelo. Solo de eso hablé, de modo que tu comentario se salió de pista. Faltó a la Caridad cuando dijo: "No le perdonaré si él no se retracta", y dije que Jesús perdonó a sus asesinos, SIN PONER CONDICIONES, como lo hace Livieres, porque el "ojo por ojo" ("él me tira una piedra, yo le tiro otra piedra") no es doctrina cristiana. Le ruego que leas con mayor calma mis comentarios, o que te abstengas de juzgarlos superficialmente, sin haberlos comprendido a cabalidad.

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